Una JAULA grande requiere una limpieza menos frecuente y disfruta de un espacio para jugar y ejercitarse. Como TAMAÑO orientativo mínimo de una jaula para cobaya sería 65 cm de largo, 40 cm de ancho y 35 cm de alto. Añade al menos 20 cm cuadrados o más por cobaya adicional. Según mi experiencia personal, la jaula ideal para una cobaya adulta sería de un mínimo de 100 cm de larga, puesto que si colocamos la caseta, un cuenco de comida y quizás alguna amaca o esquinero, casi no le quedaría sitio para moverse. También sería conveniente que pudiese salir de la jaula diariamente, por alguna zona de la casa que no implique peligro para la cobaya, alejada de interruptores, cables de electricidad, etc... ya que les gusta roerlos. Si podeis, sería ideal una especie de corralito, donde pueda estar a sus anchas un buen rato, o incluso una habitación libre de los peligros comentados anteriormente.
Durante los primeros días de estancia en su jaula no es recomendable ponerle madriguera mientras estes con la cobaya, puesto que se esconderá en ella y no saldrá, con la dificultad añadida para poderlo coger. Es conveniente que le hables y lo cojas constantemente, acariciandolo, para que rápidamente se acostumbre a nuestras voces y coja confianza. Procura poner la jaula en un sitio alto, para poder ver a tu cobaya con más facilidad y que el animal no te mire desde allá abajo como un depredador. De ahí que la jaula esté en alto, para que cuando te acerques, su perspectiva sea menos aterradora al poder verte a su altura. Intenta darle de comer en tu regazo, para que te asocie con algo bueno cuando la coges.
A ser posible la jaula tendrá su base de plástico, que es mucho más fácil de limpiar. Hay otras jaulas con rejas inferiores para facilitar la limpieza del fondo, pero que pueden dañar las patas de tu cobaya.
Si no dispones de otras mascotas puedes dejar la parte superior de la jaula abierta para poder interactuar mejor con tu cobaya.
ATENCIÓN: Nunca dejes a un cobaya sin supervisión en presencia de un perro, gato o cualquier otro animal depredador.
Cubre el suelo de la jaula con un colchón de al menos 2 cm de chipsi de maíz, es un granulado de maíz muy absorbente y libre de polvo. Otra alternativa es la viruta, (pero cuidado, porque alguna proviene de muebles barnizados y/o tratados con pinturas que podrían ser tóxicas para tu cobaya). Pon también un buen colchón de heno, puesto que además de comerselo, lo usa para dormir. Los cilindros de fibra vegetal son muy absorventes, pero por contra tienden a deshacerse rápidamente y formar barro. La viruta prensada es una buena opción, porque son bastante absorbentes, no desprenden gran olor y son suaves al contacto con la cobaya. También puedes combinar las virutas, con paja, forro polar, esterillas de goma espuma, en fin todo lo que se te ocurra. Hay que ir probando lo que mejor se adapte a las necesidades, tanto de la cobaya como a las tuyas, ya que quien va a limpiar la jaula no es precisamente la cobaya.
Nosotros, entre todo lo que hemos probado, nos quedamos:
Para invierno, viruta de madera con abundante paja por encima, no huele en prácticamente una semana y los mantiene calentitos.
Para verano, viruta de madera prensada, es más caro, pero tampoco huele en una semana.
NO RECOMENDADO: El serrín y las piedras de gatos, por que pueden provocarle problemas respiratorios.
Coloca a tu cobaya en una habitación luminosa, en un lugar algo elevado, con una temperatura estable de entre 18º y 25ºC, sin exponerlo a la luz del sol directa ni a corrientes de aire y a ser posible donde pueda vernos.
Por último, en su jaula coloca un bebedero, un comedero pequeño y pesado difícil de volcar para los pellets, una casita o escondite para dormir. Con respecto a los comederos, les encanta volcarlos, sobre todo cuando llevan pienso, ya que les gusta extender todo el pienso por el suelo y así comerse solo lo que les gusta.
Como complemento convendría tener una pequeña jaula para poderlo llevar de viaje o a sus visitas periódicas al veterinario.
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